Joe Ingles y Alan Anderson fueron las dos incorporaciones que tuvo que hacer la Secretaría Técnica del Regal FC Barcelona ante la avalancha de lesiones que afectaron al equipo de Pascual en el primer tercio de la temporada.
Gianluca Basile, primero, Pete Mickeal después y, finalmente, un período de 15 partidos en los que
Juan Carlos Navarro tuvo que estar al margen del equipo por culpa de sus problemas de espalda
obligaron a Joan Creus a revisar la situación del mercado para traer a jugadores exteriores que
sustituyeran a los lesionados. Así es como llegaron el australiano Joe Ingles y el estadounidense
Alan Anderson.
Ingles, con experiencia ACB
La primera apuesta fue sobre seguro. A pesar de su juventud, 23 años,
el australiano Joe Ingles ya sabía cómo las gastaban en la ACB tras una temporada entera en el CB
Granada. En el equipo andaluz sólo disputó siete partidos del actual ejercicio y el octavo ya fue
para debutar con la camiseta azulgrana en partido ACB. Sería en la pista del Caja Laboral.
Curiosamente, el mejor partido de la temporada lo había hecho ante el Regal Barça. Fue en la
segunda jornada de Liga, cuando anotó 25 puntos y obtuvo un 34 de valoración.
Sin embargo, el rol que tuvo que adoptar Ingles al llegar al Regal Barça fue completamente
distinto al que había tenido hasta entonces. Acostumbrado a jugarlo todo en el equipo que entrenaba
el catalán Trifon Poch, su llegada al equipo de Pascual cambió su panorama. Pasó a jugar menos
minutos pero lo cierto es que su adaptación fue muy rápida. Su carácter extrovertido y su buena
relación con todos los jugadores -especialmente con Lakovic, Ricky y Sada- le hicieron entrar con
muy buen pie. Además, el trabajo específico de tiro con los técnicos asistentes de Pascual también
le hicieron mejorar en este aspecto. Ingles firmó contrato por tres temporadas.
Anderson, el MVP de la Copa
El caso de Alan Anderson fue llegar y besar el santo. Con poco tiempo, este
trotamundos del baloncesto -ha jugado en cuatro equipos europeos diferentes en cuatro temporadas-
demostró porque se le había contratado. El alero estadounidense de Minneapolis llegó para ser
decisivo y lo demostró a las primeras de cambio. En su segundo partido, jugado en Miribilla ante el
Bizkaia Bilbao Basket, el '32 'del Regal Barça sentenció un encuentro muy igualado con un
lanzamiento sobre la bocina. Aquello fue en la jornada 14 de la ACB, el 2 de enero de 2011.
Un mes más tarde, Anderson volvería a demostrar que había sido un nuevo
acierto de la Secretaría Técnica y de Xavi Pascual, que tuvo que elegir entre él y un Mickeal
recuperado de su condropatía rotuliana, pero al que le faltaba un evidente ritmo de competición
para afrontar un torneo tan exigente e intenso como la Copa del Rey. Anderson se acabaría
convirtiendo en el MVP de aquella competición y pudo levantar su primer título como azulgrana,
además del galardón individual. De aquí hasta final de temporada, el estadounidense siguió siendo
bastante regular terminando el campeonato como el segundo máximo anotador del equipo por detrás de
Juan Carlos Navarro.