La mejor temporada de la historia

La Liga, la Copa de España, la Copa del Rey y la Copa Catalunya. Mejor, imposible. Cinco temporadas después de iniciar el camino en la División de Honor, el Barça Alusport logró todos los éxitos posibles en un curso para enmarcar.

El proyecto azulgrana volvía a la División de Honor la temporada 2006-07 con mucha ilusión y muchísimo trabajo por hacer. La apuesta del Club fue firme, el objetivo era llevar el nombre del FC Barcelona a la élite del fútbol sala. La sección se había profesionalizado un año antes y después de volver a la máxima categoría -con el inolvidable ascenso en Gáldar- el reto era seguir creciendo sin parar, hasta tocar las estrellas.

Cinco años de trayecto difícil, con decepciones y derrotas, pero la gran victoria fue no haber desistido. Haber confiado en un proyecto serio, bien pensado y trabajado. Muchos jugadores se quedaron en el camino en estos años, pero también ellos fueron partícipes de este éxito. Porque cinco años después de aquel ascenso en tierras canarias, el nombre del Club consiguió figurar entre los mejores. Arriba de todo, con letras de oro. Y es que la temporada 2010-11 quedará para siempre como una temporada perfecta en la que se alcanzaron todos los títulos posibles.

Un equipo, una piña

Ahora es hora de recordar y valorar que Javi Rodríguez apostó en su día por hacer grande esta sección. Ver al mejor jugador español de la historia de este deporte levantando todos los títulos como capitán azulgrana queda grabado como un tatuaje en la mente de los aficionados del Palau. A su lado, un grupo humano envidiable y un talento desbordante en la pista, con el apoyo de una afición cada vez más entregada a la causa, que hicieron del Barça Alusport el mejor equipo del año.

Un equipo que en agosto empezaba a trabajar con la misma presión de siempre, quizá más incluso, con el botín de grandes títulos en blanco pero una confianza firme en el guión dibujado. El curso comenzó como tocaba, alargando la hegemonía en la Copa Catalunya, territorio azulgrana en los últimos años. Pero el reto era mucho más ambicioso. Había que jugar una gran final, fuera como fuera. Y había que ganarla.

Era un proyecto cocinado con mucha paciencia, a fuego lento, pero que no podía esperar más. Y Segovia, en el mes de febrero, se convirtió para siempre en ciudad ligada al barcelonismo. En el Pedro Delgado llegó el primer título, la Copa de España. "El primero es siempre el más difícil, los próximos títulos vendrán solos", pronosticó el propio Javi Rodríguez. Su abrazo con Chico y Marc Carmona -los tres veteranos del proyecto- al final de aquel partido contra El Pozo simbolizó años de sufrimiento, de trabajo, de lucha, de inconformismo. ¡Este año, sí!.

En Europa, a seguir haciendo historia

Y el capitán no falló en su predicción. Un par de meses más tarde llegó la Copa del Rey, un nuevo torneo y la primera edición la ganó el FC Barcelona, que para siempre quedará registrado en los libros de historia. Y finalmente la Liga, la deseada Liga. El mejor título. El mejor final para una temporada perfecta, en que el equipo fue el más regular, el mejor en defensa, uno de los mejores en ataque y, sobre todo, el más solvente en todo momento. Esto le dio el billete para jugar en Europa, donde el Barça Alusport intentará seguir creciendo, seguir ganando y ser el mejor. Quién sabe si ahí empezó una leyenda.