25.06.2010 18:20
El 4 de O'Callaghan ya toca el cielo del Palau
El 25 de abril de 2010, tras un gran partido europeo del Barça contra el Veszprém, Xavi O'Callaghan recibió un merecido homenaje por su trayectoria en el club. Su dorsal número 4 ya cuelga en el techo del Palau, tras un acto lleno de emotividad.
Ni un alma de las que dieron apoyo al Barça Borges contra el Veszprém (33-27) se quiso perder el
epílogo de un partido para recordar. Uno de los grandes artífices del Dream Team, el crack
silencioso, el jugador que todo entrenador quiere tener en su equipo, una de las almas de aquel
vestuario y ahora hombre de club, Xavi O'Callaghan, recibió el reconocimiento de todo el balonmano
azulgrana.
El grupo celta Di Alan y los bailarines BCN Celtic Caos, en honor a sus orígenes irlandeses,
acompañaron la salida a pista del homenajeado. O'Callaghan mantuvo la compostura como buenamente
pudo.
Tras un vídeo con imágenes de su etapa de jugador, O'Callaghan se vio acompañado de todos los
jugadores del actual Barça Borges y de grandes nombres del balonmano azulgrana. Grau, Masip,
Guijosa, Ortega, Svensson, Solberg, Barbeito, Xepkin, Serrano, entre muchos otros, no faltaron a la
cita.
Apoyo de la familia
El periodista Ricard Torquemada, conductor del
acto, dio entrada al hijo mayor de Oca, Pau, que pronunció un "Te quiero, papá" que puso la carne
de gallina a todos y le hizo entrega de un balón firmado por todos los componentes del Dream Team.
La mujer de Xavi O'Callaghan, Laia, con Noa en brazos, su hija de dos meses, acompañaron al ex
jugador azulgrana, que vio como era su hermano David quien descubría la camiseta con el cuatro
brillando con luz propia junto a las de Grau, Masip, Urdangarín y Sagalés.
El turno de palabras descubrió a un O'Callaghan emocionado, pero sobre todo agradecido. "No
os podéis imaginar cómo me siento de orgulloso", empezó diciendo. Tuvo palabras de recuerdo hacia
Xesco Espar - "creíste en mí antes que yo mismo y eso no se olvida" - y Valero Rivera, dos de los
entrenadores que más le han marcado en su carrera, y hacia el presidente Joan Laporta. También
agradeció el trabajo de los compañeros y el apoyo del público del Palau, una gente azulgrana que le
dedicó la ovación de la tarde. Xavi O'Callaghan acabó dando la vuelta de honor. Ya es un mito
azulgrana.