La temporada 2006-07 fue un éxito casi total. Con el fichaje del ex jugador del CP Vic Josep Maria Ordeig, la única mancha negra de la sección de hockey patines del FC Barcelona fue el hecho de no haber podido lograr la Supercopa de España.
Su máximo rival por excelencia, el Reus Deportiu, fue el ganador de la única competición que no
ganaron los hombres de Quim Paüls.
En cuanto al resto, los barcelonistas se mostraron del todo intratables. Ganaron todo cuanto
se les puso a tiro. La primera victoria de todas, sin embargo, fue la la Copa Continental, ganada
ante el Follonica, un equipo del que querían vengarse, ya que, la temporada anterior les dejó fuera
de la liguilla de la Liga Europea, después de una eliminatoria muy polémica. En el partido de ida,
disputado en el Palau, los locales consiguieron una amplia victoria por 7 a 1, mientras que en
Italia perdieron por 2-0.
La Copa, ante el Reus
El siguiente título que levantaron los hombres de Quim Paüls no llegó hasta finales de
febrero, en la localidad de Alcoy. El Barça Sorli Discau se sacó otra espina clavada después de
superar, en la gran final, al Reus Deportiu, el mismo equipo que la temporada anterior les había
superado en esta misma competición. Los barcelonistas se impusieron con absoluta claridad por 3
goles a 1.
Bassano, a los pies del Barça
Pero, sin duda, el tramo final de la temporada tenía que ser el más importante en cuanto a
los títulos. La Liga Europea y la OK Liga se volvieron a teñir de azulgrana. La decimoséptima Copa
de Europa fue el primero de estos dos últimos títulos que tenían que llegar. La pequeña localidad
italiana de Bassano fue la sede de la final a cuatro, y el conjunto local, el Oporto, el Vic y el
FC Barcelona Sorli Discau, los protagonistas que centraban todas las miradas del hockey rodado en
Europa. El Barça, después de superar al Oporto en la semifinal en un encuentro disputado, ganó a
los anfitriones en la gran final, y logró, de esta manera, la decimoséptima Copa de Europa de su
historia.
Los del Baix Camp vuelven a claudicar
El último gran plato de la temporada fue la final de la OK Liga. El Barça se volvió a ver las
caras con el rival más odiado, deportivamente hablando. Los hombres de Quim Paüls, sin embargo, no
dieron opción al equipo de Manel Barceló y se llevaron una nueva Liga, la décima de manera
consecutiva, después de resolver por la vía rápida con un global de 3-0. El equipo del Baix Camp no
pudo hacer nada ante un Barça que vivió en aquel último partido la despedida del capitán José Luis
el ‘Negro' Páez.