Máximo respeto entre dos equipos que se conocen bastante bien. El cuarto clasificado de la Superliga, el Barça, recibía al Cajasol, sexto, en un duelo de pendientes. Los de Toni Alemany recordaban bien como los sevillanos les ganaron en la primera vuelta. Pero la seriedad sobre la pista condujo a los azulgranas a sumar ya cinco victorias consecutivas.

El partido arrancó con dominio evidente del Barça. Gustavo Saucedo, muy inspirado en el servicio, y el bloqueo local dieron el primer punto a los de Alemany. Sin embargo, un ex del Barça, Miguel Ángel De Amo, dejó el marcador en un 25-22 gracias a una gran presión con el saque.

El segundo set fue mucho más ajustado, al menos al comienzo. Pero para evitar riesgos, los azulgranas contraatacaron rápidamente. Fran Ruiz, que hizo mucho daño en la ida, no pudo demostrar sus mejores virtudes, ya que aún no está del todo recuperado de una lesión que le ha mantenido lejos del seis titular en las últimas cuatro jornadas. Así que, por el mismo resultado, el Barça sumó el 2-0.

Pero en el tercer parcial el Cajasol Juvasa castigó duramente el sistema de recepción local. Hubo la ayuda del banquillo, con Sergi Martín, para poder controlar el servicio de De Amo. Ángel Galindo, Aarón Gámiz y Sergi Arranz mantuvieron al Barça dentro del juego pero no fue suficiente para ganar el set (22-25).

El partido se decidió en la cuarta manga, mucho más relajada. Parres y Saucedo salieron fuertes en el saque, y llegaron a encadenar seis servicios gracias a los bloqueos de sus compañeros. 25-17 final y un nuevo triunfo del Barça, que acumula 34 puntos y sigue siendo cuarto en la Superliga.