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Baloncesto
02.11.2007 14:00
El debut en el Palau del capitán
Sònia de Alba
Roger Grimau pudo encabezar la salida del equipo en la pista del Palau. Después de superar la lesión en la mano, el capitán del AXA Barça puso la intensidad de siempre para ayudar al equipo en el primer triunfo a la Euroliga.
Se estrenaba oficialmente en casa como capitán del primer equipo de baloncesto. Ya jugó el domingo en Girona pero hacerlo en el Palau es otra cosa. “Ya tenía ganas de jugar en el Palau, es una sensación muy especial. Ayuda volver a jugar aquí sobre todo cuando llevas tanto tiempo sin hacerlo”. Así de contento explicaba el mismo jugador como se sentía.
Grimau se dejó la piel, como siempre, en los cerca de 19 minutos que jugó contra el Fenerbahce . En este tiempo sumó 11 puntos con un 67% en tiros de dos y un 50% en triples. El dorsal 44 del AXA Barça capturó 3 rebotes, dio una asistencia y cometió 4 faltas.
El regreso, en Girona
Roger Grimau se rompió el cuarto metacarpiano de la mano derecha el 17 de
septiembre en una jugada fortuita durante un entrenamiento. El domingo pasado, contra el
Girona, el escolta de Sants ya pudo jugar sus primeros minutos oficiales de la temporada. Su
carácter agresivo en pista se nota y ayuda mucho al equipo. “Roger es el tipo de jugador que
nos ayuda a cambiar de ritmo el partido”, comentaba el entrenador del AXA Barça, Dusko
Ivanovic.
Pepe Sánchez, casi perfecto
Juan Ignacio ‘Pepe' Sánchez volvió a salir a la pista como relevo de Jaka Lakovic. A medida que pasaban los minutos el dibujo táctico del equipo también cambió. Sánchez se combinaba con Jaka Lakovic. Pepe, de director de juego, y el esloveno, como escolta. La actuación del argentino fue casi perfecta. En algo más de 26 minutos en pista, Pepe aportó aquellos elementos intangibles e incontables que no salen en la estadística pero que son muy importantes en el juego del equipo.
A pesar de eso, Sánchez sí que fue el más valorado del partido con uno 22. “Pepe ha hecho
casi todo y prácticamente todo bien”, sentenciaba Dusko Ivanovic sobre su jugador en rueda de
prensa posterior al partido contra el Fenerbahce. El punto de desazón fue el golpe que recibió en
la mano en la última acción de partido. Sánchez se tranquilizó ya en el vestuario: “Sí
que aún me duele, pero el doctor me ha dicho que no parece grave y que, en todo caso, lo superaré
bien y rápidamente”.
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