29.06.2009 12:33
Verònica Díez
Treinta y un años, 1’99 de altura y una vida deportiva llena de éxitos. Ambición y carácter no le faltan a Mickeal, que se deja la piel en la pista y cree en los colores que defiende hasta el límite. Creus se deshace en elogios cuando habla de él.
El currículum del
alero
norteamericano
recorre Estados Unidos, Asia y Europa. En 2005 aterrizó en la ACB y en 2007 fichó por su
último equipo, el TAU Cerámica. Su potencial físico lo convirtió en el amo de los rebotes y en un
pilar básico del equipo vasco. La pasada campaña fue nombrado el jugador más valioso del año.
Ahora, con la temporada 2008/09 finalizada, se traslada al Regal FC Barcelona dejando a sus
espaldas 763 puntos y 347 rebotes en un solo curso.
A nivel europeo, el jugador también ha sido un claro referente del equipo entrenado por Dusko
Ivanovic. Su equipo fue eliminado en el play-off de cuartos por el Regal FC Barcelona y hasta
entonces había conseguido un promedio de 5,6 rebotes por partido. Toda una garantía bajo canasta.
Los argumentos de Creus
"Es un alero fuerte, alto, polivalente y que refuerza la posición de '3' en la pista.
Contribuirá a hacer mejor el equipo, explica Joan Creus, que sentencia: "Es un gran jugador, muy
competitivo y ganador." El secretario técnico recuerda, además, otro factor importante y que ha
sido decisivo a la hora de contratarlo: "Debemos tener presente que Lubos Barton está lesionado y
será por unos meses".
La presión no puede con él
Si algo ha demostrado Mickeal es que la presión de los
momentos más cruciales de un partido no le hacen venirse abajo, sino todo lo contrario. El ahora
jugador azulgrana se crece ante las adversidades. Su carácter y afán de victoria lo hacen letal en
situaciones límite y un claro ejemplo lo encontramos en la final de Copa de esta temporada. El TAU
se enfrentaba al Unicaja. El de Illinois obtuvo un 24 de valoración en una prórroga
espectacular. Fue el encargado de encestar la canasta de la victoria y de impedir, gracias a
un espectacular tapón, una canasta rival en los últimos instantes.
Un auténtico trotamundos
Mickael comenzó a jugar a baloncesto en el Hills Community College hasta que fue cedido al
equipo de la Universidad de Cincinnaty. Aquí permaneció dos años antes de entrar en el Draft de la
NBA en el que consiguió una segunda plaza y pudo fichar por los New York Knicks. La temporada
2000/01 tuvo la oportunidad de probar otra de las Ligas americanas, la ABA. El Tampa Bay
Thunderdrawgs, el Kansas City Knights y el Talk’N Text Phone Pals fueron testigos de la gran
evolución del alero y de su enorme proyección.
De EE.UU a Europa
Pero no sólo en Estados Unidos se dieron cuenta del fenómeno Pete Mickael. El Peristeri de
Grecia decidió incorporarlo a su disciplina en 2003 y el Makedonikos en 2004. Entre medio de estos
dos equipos, el estadounidense se marchó a Rusia para jugar unos meses con el Dynamo de Moscou.
Llega a la ACB
Al finalizar su viaje por tierras griegas, el jugador llegó
a la ACB. El Leche Río Breogán contó con el huracán americano en la temporada 2005/06. Ahí destacó
sobremanera. Pero su tour por las Ligas del mundo no acaba aquí. En 2006 probó suerte en Corea del
Sur con el Daegu Orions. Éste fue su último equipo antes de regresar a la ACB en la que lleva
jugando las dos últimas temporadas con el TAU.
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2001-02, Campeón de la ABA (Kansas City Knights)
2004-05, Subcampeón de la Uleb Cup (Makedonikos)
2007-08, Campeón de la Supercopa ACB (TAU)
2007-08, Subcampeón de la Copa del Rey (TAU)
2007-08, Campeón de la Liga ACB (TAU)
2008-09, Campeón de la Supercopa ACB (TAU)
2008-09, Campeón de la Copa del Rei (TAU)