10.04.2010 19:52
Sònia de Alba
Un paso más y el Regal Barça es virtualmente campeón de la fase regular de la ACB. Los azulgranas han vuelto a superar al Real Madrid, al que han llegado a ganar de 24 puntos, y lo dejan a cuatro triunfos por debajo.
Juan Carlos Navarro, con 20 puntos, y Erazem Lorbek, con 15, han sido los jugadores más
entonados del octavo clásico de la temporada. Los hombres de Pascual han hecho una primera parte
excelente, con una defensa magnífica y un ataque eficiente. El buen planteamiento ante el Madrid ha
hecho al Regal Barça romper el encuentro ya en el segundo tiempo, en que se ha alcanzado una máxima
diferencia de 24 puntos. La victoria 27 en 29 jornadas ACB sitúa a los azulgranas virtualmente
campeones de la fase regular de la Liga.
Sin dudas
Una final de Supercopa, otra de Copa del Rey, el partido de la primera
vuelta ACB y tras cuatro enfrentamientos en el play-off de cuartos de final de la Euroliga el grado
de conocimiento entre el Regal Barça y el Real Madrid es superlativo . Pero, aun así, los
azulgranas han sabido sorprender a los de Ettore Messina, con los que el balance es de 7-1 en
partidos oficiales (8-1, si se suma la victoria de la pretemporada en el StagePro de Reus).
La defensa ha marcado las diferencias ya en la primera parte. Y es que tras un primer periodo
igualado con respecto al marcador, en el segundo cuarto el Madrid ya se ha descolgado en la
anotación. La carta de tiro visitante hasta el descanso ha sido mediocre: sólo cuatro tiros en
juego y el resto de los 25 puntos se han conseguido desde la línea de personal.
Fieles al espectáculo
Con este planteamiento y eficacia en la ejecución, los azulgranas han
buscado el espectáculo. Lorbek ha encontrado una pobre oposición en sus parejas de baile. Y el
marcador se ha situado por encima de los 20 puntos. Entre Ricky Rubio (que ha jugado el
partido 150 ACB) y Fran Vázquez han dejado el 52-28 de máxima renta a favor azulgrana.
Aunque la filosofía de juego no ha variado, con los hombres de Pascual intentando buscar la
mejor combinación y corriendo al contragolpe, algunos errores han propiciado el recorte de las
diferencias y el Real Madrid, con Llull y Tomic como únicos espíritus con energía , han dejado el
marcador final en 78-73, una diferencia maquillada por todo lo que se ha vuelto a vivir entre Barça
y Madrid.