12.01.2011 12:19

Prueba de concentración

Carles Cascante

El encuentro de esta noche (20h) ante el Meridiano Alicante es una buena prueba de concentración para los hombres de Pascual. Visita el Palau un equipo que es cuarto por la cola, muy necesitado y que seguro que no pondrá las cosas fáciles.

Por el cabeza del Regal Barça, sin embargo, no pasa otra cosa que no sea la victoria. En la retina de muchos de los jugadores azulgranas seguro que todavía está el partido de la cuarta jornada ACB que se perdió ante el CAI Zaragoza, un recién ascendido que acabó imponiéndose en el último suspiro ( 70-71 ). Pascual y sus jugadores no quieren que esto vuelva a suceder ante un rival que llega al Palau con piel de cordero.

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Los azulgranas pasan por un momento dulce, el más dulce de la temporada, aunque todavía tienen a dos lesionados de peso -Basile y Mickeal- y a un Alan Anderson que arrastra molestias en su tobillo derecho después de dos esguinces sufridos en dos partidos ACB -Bilbao y Málaga-. El juego de los de Pascual, sin embargo, se asemeja cada vez más al que ofrecieron la pasada temporada y el hecho de recuperar las mejores versiones de hombres como Lorbek o Navarro se nota mucho.

El equipo ha hecho un punto y seguido en la ráfaga de cuatro partidos consecutivos lejos del Palau -Bilbao, Málaga, y los próximos en San Sebastián y Canarias- para jugar contra un rival peligroso y ante el que habrá una buena dosis de concentración.

El rival

El Alicante no pasa por un buen momento. Sólo 4 triunfos por 11 derrotas son el bagaje del cuarto clasificado por la cola que tiene en Martin Rancik a su máxima estrella. El eslovaco es un auténtico trotamundos que esta temporada ya ha jugado en tres equipos distintos: Bilbao, Caja Laboral y ahora, en el Meridiano Alicante.

Otro jugador interesante es Martynas Andriuskevicius, un gigante de 2.18 m. que seguro que se las tendrá que ver con Kosta Perovic, el techo azulgrana, que mide un centímetro menos que el lituano. El entrenador del Meridiano era Oscar Quintana, pero los malos resultados provocaron su destitución. Ahora es un buen amigo de Xavi Pascual, Txus Vidorreta, el que conduce las riendas del banquillo alicantino.

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