07.12.2007 16:59
Àngels Prieto
El directivo del Área Social, Rafael Yuste, ha calificado de impactante e inolvidable la experiencia vivida en Swazilandia, donde ha podido conocer sobre el terreno los primeros resultados de la alianza entre el FC Barcelona y Unicef.
Rafael Yuste no olvidará nunca los tres días que, junto con el presidente Joan Laporta y una
delegación del FC Barcelona, ha pasado en Swazilandia. El directivo azulgrana ha podido comprobar,
in situ, el resultado del primer año de trabajo en el estado sudafricano, gracias a la aportación
económica del FC Barcelona y su Fundación. “Realmente, no se puede describir con palabras las
sensaciones que te provoca el ver los ojos de unos niños sin ningún tipos de esperanza, la mayoría
de ellos enfermos de Sida. Queremos que recuperen la esperanza –ha explicado Yuste- pero por
ello tienen que poder vivir. Sin vida no hay esperanza y éste es ahora nuestro objetivo”.
“Nuestra ayuda es como el agua de lluvia”
La situación en
Swazilandia
es dramática, con más de 100.000 niños huérfanos por culpa del Sida, y por ello, la
colaboración humanitaria es tan importante. “El representante de Unicef en el país, Jama
Gulaid, nos dijo que nuestra ayuda era como el agua de la lluvia: cada gota que cae del cielo es
una gota de felicidad” continúa Yuste.
Gracias al millón y medio de euros que el FC Barcelona ha destinado a Swazilandia, Unicef ha
podido construir pozos de agua potable, letrinas, y ha ayudado a la construcción de 23 Centros de
Soporte Comunitario para acoger a muchos de estos niños y niñas huérfanos.