14.06.2007 19:45
Marc Guillén
Cuando sólo queda una jornada para el final de la Liga, Txiki Begiristain y Unzué se muestran esperanzados y conscientes de que lo único que se puede hacer “es ganar en Tarragona”, pero también se muestran reflexivos y reconocen los errores azulgrana
En la
cena del fútbol base
, el balance del plantel fue uno de los temas principales, pero el desenlace de la Liga
también estaba en boca de la mayoría de responsables técnicos y entrenadores del club.
El director deportivo azulgrana, Txiki Begiristain, está plenamente esperanzado que se puede
ganar la Liga y en gran parte, debido a su experiencia como jugador: “Creo que es el momento
de encontrar aquel punto de suerte que a veces nos ha ayudado…, y mi experiencia, así me lo
dice. Básicamente, esta es la esperanza que mantenemos pero siempre partiendo de una base: nosotros
debemos ganar nuestro partido”.
Begiristain pide la máxima concentración a los jugadores para ganar el partido contra el
Nàstic y no “dar por hecho cosas que no están hechas, que ha sido uno de los errores que
hemos cometido esta temporada”. El director deportivo azulgrana reflexiona también sobre la
temporada y los errores que se han producido: “A veces ha habido momentos de relajación y a
lo largo de la temporada, algún problema de actitud”.
De esta manera, Txiki cree que el equipo que se acabe proclamando campeón de Liga será el
justo vencedor y no valdrá para nada pensar en los puntos que se han dejado escapar o como habría
cambiado todo si se hubieran ganado los partidos del Betis o el Espanyol en el Camp Nou.
La valoración de Unzué
Por su parte, el entrenador de porteros Juan Carlos Unzué asegura que esta semana se está
trabajando mucho para recuperar la moral perdida ante el Espanyol: “El pasado sábado sufrimos
un duro golpe. Durante esta semana hemos intentado reanimar el grupo para conseguir nuestra
obligación, apuntalar el partido contra el Nàstic. A partir de aquí…, bien, ya veremos qué
pasa y si se da lo que necesitamos". "¿Y por qué no sw debe dar?”, concluye con esperanza.
Sea cómo sea, al Barça sólo le queda una opción: “Mi situación personal y mi cabeza
sólo me dicen una cosa, que debo gastar toda la energía en aquello que podemos controlar, y esto es
ganar el partido de Tarragona. El resto, no podemos hacer nada.”
Además de la evidencia que los azulgranas no pueden influir en el partido del Real Madrid, el
equipo no debe pensar en eso porque es contraproducente: “Si te preocupas mucho del resto,
esto acaba restandote energía a uno mismo, no? Además, tenemos una clara prueba de este hecho en el
partido del fin de semana pasado. Desde hace cuatro o cinco jornadas yo creo que todos hemos sido
muy conscientes de que si nosotros ganábamos todos los puntos tendríamos suficiente. Bien,
desgraciadamente no los hemos podido ganar. Ahora sólo nos queda seguir luchando y ganar en
Tarragona y esperar”.