09.12.2007 11:14
El Deportivo, un visitante peligroso
Jordi Clos
Los gallegos, a pesar de estar en zona de descenso, son un visitante peligroso. Los de Miguel Ángel Lotina son más fuertes lejos de Riazor, con dos victorias y tres empates, que en casa donde sólo han sumado 4 puntos de 21 posibles.
El Deportivo de La Coruña llega al Camp Nou en el peor momento de la temporada: la última jornada
cayó en la zona de descenso después de perder contra el Osasuna en Riazor por 1-2. Los partidos en
casa se han convertido en el talón de Aquiles del conjunto que dirige Miguel Ángel Lotina. La mala
clasificación es la consecuencia directa de los pésimos resultados en su estadio. De hecho, el
Deportivo es el peor local de la categoría, ya que sólo ha sumado 4 puntos de 21 posibles.
Fuertes lejos de Riazor
En cambio, los registros de los blanquiazules a
domicilio
son más positivos, con 2 victorias y 3 empates. Y es que la filosofía de Lotina, la de dejar
hacer al contrario, acostumbra a ser mucho más efectiva cuando sus equipos juegan de visitantes,
ante rivales más abiertos. El contraataque es el arma predilecta de un Depor que fuera de casa
únicamente ha encajado 8 goles en siete partidos.
Con la defensa bien amueblada, sobre todo lejos de Riazor, el problema de los gallegos parece
que está delante. La ausencia de un referente goleador limita mucho el potencial ofensivo. Un dato
que pone de manifiesto la falta de un ‘hombre-gol' es el hecho de que sus máximos artilleros
(Guardado, Riki y Xisco) sólo han conseguido tres dianas cada uno.
El técnico quiere “más carácter”
El momento delicado que atraviesa el Deportivo hace que no se pueda permitir el lujo de
visitar al Barça sin presión, con nada que perder, como dicen algunos equipos de la parte
media-baja que pasan por el Camp Nou. Se juegan mucho, principalmente Lotina. El técnico vasco
quedó en una situación comprometida después de la derrota ante el Osasuna, y pidió “más
carácter” a sus jugadores. Hay que ver como se ha tomado la plantilla el toque de atención
del entrenador. La preocupación en el club que preside Augusto César Lendoiro es tanta que incluso
se plantea retocar la plantilla cuando se abra el mercado de invierno.
Los refuerzos: jóvenes promesas
El Deportivo se reforzó con cuatro jugadores de un promedio de edad de 21 años. Es la
política de fichajes de la entidad coruñesa de las últimas temporadas: futbolistas con un futuro
prometedor y con muchas cosas aún para demostrar. La juventud es su punto fuerte, por la ilusión y
las ganas de progresar que comporta, pero también es un hándicap para un equipo que, como es su
caso, se encuentra en una posición crítica. La visita al campo del Barça puede ser el examen ideal
para conocer el grado de madurez de este Depor y para evaluar las opciones de vivir la Liga en la
zona tranquila.