12.01.2009 12:52
Goles ‘10' en Pamplona
Jordi Clos
La diana extraordinaria que logró Leo Messi en el feudo de Osasuna persistirá para siempre en el recuerdo, como en su día quedaron la vaselina de Romario y la tijera de Ronaldinho.
El antiguo Sadar, ahora Reyno de Navarra, ha coronado a algunos de los mejores jugadores de la
historia reciente del FC Barcelona. Romario da Souza (1993), Ronaldinho (2004) y Leo Messi (2009)
ofrecieron su mejor versión y marcaron goles de antología en el campo de Osasuna. Todos ellos lo
consiguieron luciendo el ‘10' en la camiseta. Los dos brasileños se convirtieron en mitos del
barcelonismo, el argentino va por el camino.
El año de Romario
La temporada 1993/94, la de la cuarta Liga consecutiva del Dream Team, es considerada como
‘el año de Romario'. Lo es gracias a goles como el que logró en El Sadar. El 3 de octubre de
1993, el Barça ganaría a Osasuna por 2-3 gracias a dos dianas de Romario y otra de Stoitxkov. La
más recordada es la primera de O'Rey, en la que Laudrup le hizo un pase interior de cuchara y
Romario batiría a Unanua con una precisa vaselina al primer toque.
Ronaldinho abre un ciclo
Diez años más tarde, en la 23ª jornada de la
campaña 2003/04, Ronaldinho conseguiría en el estadio navarro uno de sus mejores goles con el
Barça. En el minuto 77, un chut de Edgar Davids fue interceptado en el área pequeña por el astro
brasileño, que se iría de un defensa con sombrero y a continuación remataría a la media vuelta al
fondo de las mallas. Era el 1-2 y la confirmación de que el Barça, liderado por Ronaldinho, estaba
a punto de iniciar un ciclo glorioso.
El cañonazo de Messi
La última estrella azulgrana en brillar en el
campo de Osasuna ha sido Leo Messi. Un cañonazo impresionante del atacante argentino en el minuto
84 significó el 2-3 definitivo y permitió al Barça obtener la 13ª victoria consecutiva a domicilio
e igualar el recuerdo de puntos de un equipo en toda la primera vuelta. Como dos de sus
predecesores con el ‘10' en la camiseta, Messi decidió el encuentro de Pamplona con una
auténtica genialidad.