03.06.2009 10:58
Un ejemplo de profesionalidad
Roger Bogunyà
Se va uno de los jugadores más comprometidos, solidarios y responsables de la plantilla. Durante cinco años, Sylvinho ha servido a la entidad azulgrana en silencio desde la profesionalidad.
Que nunca haya sido un jugador protagonista no significa que no haya ofrecido un rendimiento
notable dentro del terreno de juego. Desde el lateral izquierdo, el brasileño, de 35 de años,
siempre ha respondido con eficacia. Se ha mostrado como un defensor correcto y como un jugador que
ha recorrido la banda con una calidad técnica propia de su país de origen, así como con un espíritu
ofensivo que ha encajado de forma idónea con la propuesta azulgrana. Los centros, otro de sus
puntos fuertes, han dado más de un gol al FC Barcelona.
Un suplente de lujo
Durante sus cinco temporadas en el Camp Nou, Sylvinho ha
sido más un hombre de repuesto que un titular indiscutible. Con todo, alternó el lateral izquierdo
de forma regular con Giovani Van Bronckhorst durante las temporadas 2004/05, 2005/06 y 2006/07. Las
dos siguientes lo hizo, con menor asiduidad, con Éric Abidal, ofreciendo una disposición absoluta
siempre que el francés no estaba disponible.
Su penúltimo partido, el mejor recuerdo
Uno de estos casos fue en la final de Roma de esta
temporada. Abidal fue expulsado en semifinales y Guardiola confió en Sylvinho para la banda
izquierda. El brasileño respondió como siempre y paró primero a Park y después a Rooney para anular
la banda derecha del ataque del United. Sylvinho, consciente de que su
contrato
se acababa –se le renovó por un año en el verano del 2008- vivió el encuentro de
una manera especialmente intensa. Era su penúltimo partido con el Barça. Y seguramente será uno de
sus mejores recuerdos.
128 partidos oficiales, tres goles
La historia de Sylvinho en el Barça comenzó el 13 de julio
del 2004, cuando se le presentó en la sala de prensa del Camp Nou. Tres días más tarde debutó en un
amistoso con el Banyoles y, el 11 de septiembre, lo hizo de forma oficial contra el Sevilla (2-0),
en la Liga. Desde aquel día, Sylvinho ha disputado 128 partidos oficiales con el Barça, repartidos
de la siguiente manera: 89 en la Liga, 18 en la Copa, 17 en la Champions, tres en la Supercopa de
España y uno en la Supercopa de Europa.
El gol nunca ha sido su tarea, pero ha dejado tres para el recuerdo. Los dos primeros
llegaron en Liga, en la temporada 2005/06, mientras que el último fue hace poco, en diciembre del
2008, en el último encuentro del Barça en la fase de grupos europea, contra el Shakhtar (2-3).
Un palmarés envidiable
Como suele decirse, se va un gran futbolista y una mejor persona, algo
que en este caso es indudable. Su implicación ha sido uno de sus emblemas: de hecho, no tardó en
expresarse en catalán, algo que últimamente hacía ya con naturalidad. Se lleva ocho títulos bajo el
brazo –tres Ligas, dos Champions, una Copa del Rey y dos Supercopas de España- y el cariño de
toda una afición que nunca le olvidara.