18.01.2010 12:12
Ciudad Deportiva, un año de primer equipo
Edgar Fornós
La Ciudad Deportiva Joan Gamper y el primer equipo del Barça ya hace un año que van de la mano. Este martes celebran un primer aniversario juntos inolvidable. Las instalaciones de Sant Joan Despí han sido el laboratorio de las seis copas.
Quién mejor que un grupo de ex integrantes de la Masía para conducir un traslado de toda una
plantilla donde trabajan las jóvenes promesas, la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Josep Guardiola,
Tito Vilanova i Aureli Altimira, tres de los miembros de la “colla dels golafres” de la
Masía, saben muy bien lo que supone para un jugador canterano poder estar cerca de sus ídolos:
“Cuando entrenábamos en la Masía y todo el plantel ya lo hacía en la Ciudad Deportiva, podía
parecer que para un jugador del B, por ejemplo, el primer equipo estaba muy lejos. Ahora eso ya no
pasa”, explica Tito Vilanova.
Según él, “esta proximidad entre el primer equipo y el fútbol base supone una
motivación añadida para los jóvenes futbolistas, ya que aún les hará ver la posibilidad de llegar
algún día al primer equipo”. Además, considera: “Poder entrenar en espacios tan
abiertos da una sensación de tranquilidad que es vital para trabajar”.
Los nuevos inquilinos
Con la llegada del primer equipo en la Ciudad Deportiva, el nuevo hogar se tuvo que
condicionar para recibir a los de Guardiola. Para comenzar se construyó un espacio de 300 m2, donde
se encuentra la sala de prensa, un despacho y dos salas para hacer entrevistas. Dani Alves tuvo el
honor de ser el primero futbolista del primer equipo en comparecer ante los medios en Sant Joan
Despí. Más adelante, para facilitar la estancia del primer equipo y permitir que puedan mantener
los hábitos habituales se hizo una cocina en el palco del Campo 1 y, además, un pequeño comedor.
La unión hace la fuerza
Todo el mundo sabe que la unión hace la fuerza. En este sentido, el entrenador del filial
azulgrana, Luis Enrique Martínez, valora muy positivamente poder trabajar tan cerca de los de
Guardiola: “Que el primer equipo entrene justamente en el campo del lado es muy positivo, ya
que facilita la comunicación entre los dos equipos y hace que si en algún momento determinado
Guardiola necesita algún jugador del Barça Atlètic para completar un entrenamiento, sea mucho más
fácil de gestionar”. El técnico asturiano, además, se declara admirador de la instalación:
“Es fantástica, se trabaja de maravilla. Se trata del resultado del proyecto de un club que
cuida la cantera”.
Un cambio positivo
El cambio de casa era una novedad para toda la plantilla, excepto para los técnicos
Tito Vilanova i Josep Guardiola. Al frente del Barça B ya se entrenaban en el Campo 1 de la Ciudad
Deportiva: “Pep vio la Ciudad Deportiva y pudo comprobar las maravillas y el ritmo de trabajo
que se podía conseguir. Antes siempre entrenaban en un terreno con unas dimensiones mucho más
reducidas, como era el campo de la Masía. Poder trabajar en unas instalaciones tan buenas como
éstas junto a Barcelona para el jugador supone un cambio muy beneficioso”, indica Luis
Enrique Martínez.
El mejor espejo donde mirarse
Nunca los pequeños futbolistas azulgrana habían estado tan cerca de sus ídolos. Ya hace un
año que comparten la instalación. El técnico del filial destaca: “Aunque los jugadores
jóvenes se entrenan por la tarde y el primer equipo y el Barça Atlètic lo hacemos por la mañana
siempre hay una relación directa. Para los pequeños futbolistas entrenar en el mismo lugar que los
jugadores del primer equipo es muy beneficioso, ya que es ver que algún día puedan llegar donde han
llegado ellos”.