
16.02.2010 11:00
Edgar Fornós
El mediocentro azulgrana, Andrés Iniesta, está a sólo un paso de llegar a los 300 partidos oficiales como jugador del Barça. El próximo sábado frente al Ràcing podría alcanzar una cifra sólo superada por Valdés, Puyol y Xavi.
Todas las crónicas del día después de aquel partido del 29 de octubre
del 2002 contra el Brujas ya auguraban un gran futuro para Iniesta. Todo eran elogios. Y es que el
manchego ofreció una retahíla infinita de asistencias dando, además, mucha profundidad a un equipo
que sumó, en la ciudad belga, la quinta victoria consecutiva en la Liga de Campeones tras ganar por
0-1.
De los 16 goles que ha marcado Andrés Iniesta en partido oficial hay uno que brilla
por encima de todos. Este no es otro que el de Stamfrod Bridge. Un gol de una belleza
incuestionable que clasificó al Barça para la final de Roma. En la memoria del mediocentro debe
tener también un lugar reservado el primero que hizo vestido de primer equipo. Fue un 14 de enero
del 2004, contra el Levante, en la vuelta de los octavos de final de la Copa (3-1).
Andrés
Iniesta debutó con el FC Barcelona de la mano de Louis Van Gaal la temporada 2002/03. Con Frank
Rijkaard en el banquillo se consolida en el primer equipo y es con la llegada de Guardiola cuando
explota como futbolista. En todo este tiempo Iniesta ha tenido una progresión ejemplar donde ha
llegado a jugar en tres posiciones diferentes: de pívot defensivo, de mediocentro y de extremo.