Si bien mañana miércoles los jugadores que no tienen compromisos con sus respectivas selecciones disfrutarán de un día de fiesta, Guardiola ha programado para el día antes una sesión preparatoria de carácter físico.
Por segundo día consecutivo esta semana, el conjunto dirigido por Josep Guardiola se
entrena bajo mínimos en la Ciudad Deportiva Joan Gamper debido a los compromisos internacionales de
los once jugadores que hay convocados. Seguramente, teniendo en cuenta que de cara a mañana
miércoles los que se han quedado en Barcelona tendrán fiesta, en la sesión preparatoria de este
martes, que ha tenido lugar en el campo número 2 de las instalaciones azulgranas, se ha trabajado
el aspecto físico con un circuito preparado para la ocasión.
En familia
Como el lunes, sólo han participado en el entrenamiento ocho jugadores del primer
equipo, que son Valdés, Pinto, Milito, Maxwell, Chygrynskiy, Touré, Pedro y Bojan. Como ya es
habitual, el técnico barcelonista ha convocado a algunos jugadores de la cantera para completar la
sesión, que en este caso han sido tres: Fontàs, Montoya y Jonathan Soriano.
Zlatan Ibrahimović, aún con molestias en la espalda, no ha salido al terreno de juego y
se ha quedado en los vestuarios haciendo trabajo específico, como también lo han hecho Abidal y
Keita, que continúan con sus procesos de recuperación.
Próximo entrenamiento, el jueves a las 17.30 horas
La plantilla disfrutará este miércoles de un día de descanso y no volverá a
ejercitarse hasta el jueves, en una sesión preparatoria programada para las 17.30 horas y que
también tendrá lugar en la Ciudad Deportiva Joan Gamper. En principio, está previsto que una buena
parte de los internacionales puedan participar de este entrenamiento.
Chygrynskiy, haciendo parte del circuito preparado sobre el césped de la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Fotos: Miguel Ruiz - FCB
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Pendientes del filial
Justo antes de comenzar la sesión preparatoria, tanto Josep Guardiola como algunos jugadores han
prestado atención a la actividad que en ese momento estaba teniendo lugar en el campo contiguo,
concretamente en el número 3. Y es que allí, el Barça Atlètic jugaba un partidillo con un grupo de
jugadores ingleses pertenecientes a un Campus Nike. El primer equipo, pues, siempre pendiente de un
filial que no deja de dar buenos frutos.