17.03.2010 14:08
Cien grandes noches europeas en el Camp Nou
David Puig
El Camp Nou vivirá esta noche contra el Stuttgart el partido número cien del Barça en la máxima competición europea. Desde 1959, los mejores equipos del continente han protagonizado con el Barça algunos de los capítulos más brillantes del fútbol euro
El CSKA de Sofía visitó el Camp Nou el 23 de septiembre de 1959. Era el partido de vuelta de la
primera eliminatoria de la nueva Copa de Europa de Campeones de Liga y el primero de los 99 de esta
competición que desde entonces se han jugado en el estadio azulgrana.
El Barça se estrenaba brillantemente con una goleada por 6-2 y se clasificaba para
los octavos de final. El mítico Ladislao Kubala marcó el primer gol del Barça en la máxima
competición europea en el Camp Nou, en el que fue el pistoletazo de salida hacia algunas de las
noches de fútbol más memorables de la historia del club.
1974. Hat-trick de Rexach contra el Feyenoord
El Feyenoord, campeón de la Liga de Holanda y uno de los mejores equipos del
continente, visitaba el Camp Nou el 5 de noviembre de 1974 en el partido de vuelta de los octavos
de final de la Copa de Europa. El Barça arrancó un valioso 0-0 de la ida en un partido marcado por
el barro y la lluvia. Los holandeses aseguraban que en Barcelona verían al verdadero Feyenoord,
pero no contaban con que tendrían que enfrentarse al mejor Barça. Conducido por Johan Cruyff y por
un inspiradísimo Rexach, el Barça goleó por 3-0 con un hat-trick de 'El noi de Pedralbes'. El
Feyenoord tardó mucho tiempo en olvidar aquella derrota.
1986: La noche mágica de Pichi Alonso
El partido de vuelta de la semifinal de la Copa de Europa del año 1986 ya forma parte de la
memoria colectiva del barcelonismo. El Camp Nou vivió una de las noches más mágicas que se
recuerdan. El Gotteborg sueco, un gran equipo con la mayoría de jugadores amateurs pero con un gran
nivel técnico y físico, daba la gran sorpresa ganando por 3-0 en el partido de ida. Hacía falta un
milagro en el Camp Nou y Pichi Alonso lo hizo posible. Tres goles del delantero de Benicarló
llevaron al Barça hasta la tanda de penaltis, donde Víctor Muñoz marcó el gol decisivo. La alegría
de un joven recogepelotas llamado Josep Guardiola forma parte del álbum de imágenes de aquel mítico
partido.
1993: La esencia del Dream Team
Si alguien quisiera saber que era el Dream Team, como jugaba y cuál era
su concepción futbolística, sólo tendría que ver el partido jugado en el Camp Nou entre el Barça y
el Dinamo de Kiev el 29 de septiembre de 1993. Era el encuentro de vuelta de la primera
eliminatoria de la recién creada Liga de Campeones.
Era necesaria otra noche mágica para remontar el 3-1 de la ida y el Dream Team no falló.
Pocas veces se ha visto en el estadio una exhibición de fútbol de ataque como en aquella noche.
Bakero (2), Laudrup y Koeman marcaron los cuatro goles, pero pudieron ser muchos más.
2000: La noche más feliz de Van Gaal
El 18 de abril de 2000, el Camp Nou disfrutó de otro gran espectáculo en el que se
necesitó de toda la magia del Camp Nou para levantar un resultado adverso. El Chelsea de Vialli
llegaba con un preocupante 3-1 del partido de ida. El Barça de Van Gaal no pasaba por su mejor
momento aquella temporada, pero jugó el mejor partido del año en el Camp Nou empujado por 100.000
espectadores que no pararon de animar. El Barça ganó por 5-1 después de una prórroga memorable.
Rivaldo (2), Figo, Dani y Kluivert fueron los goleadores de una de las últimas grandes remontadas
europeas en el Camp Nou.
2009: El Bayern de Múnich se rinde al mejor equipo del mundo
De
los grandes partidos europeos que el Camp Nou acogió la pasada temporada, el 4-0 contra el Bayern
de Múnich pasará a la historia como la carta de presentación del mejor equipo del mundo y uno de
los mejores de la historia del Barça. Era el 8 de abril de 2009 y el estadio disfrutó de la mejor
primera parte de la historia reciente. El Barça marcó los cuatro goles en 43 minutos, en una
avalancha de fútbol que dio la vuelta al mundo. El presidente del Bayern de Múnich, Franz
Beckenbauer, reconoció al final del partido que fue la derrota más dolorosa y humillante que
recordaba.