26.04.2010 14:18
La magia europea del Camp Nou
Jordi Clos
Cuando parece que todo está perdido, que el trayecto del Barça en Europa ha llegado a su fin, aparece el jugador doce para obrar el milagro. El factor Camp Nou, decisivo anteriormente en cinco noches inolvidables, se prepara para intervenir de nuevo.
El Barça tiene que dar la vuelta a un 3-1 adverso ante el Inter de Milán en el Camp Nou. No es una
situación nueva. Es el mismo escenario que se encontró en la vuelta de los dieciseisavos de final
de la Champions 1993/94 y en los cuartos de la edición 1999/00. Entonces, ante el
Dinamo de Kiev y el Chelsea
, los conjuntos que dirigían Johan Cruyff y Louis van Gaal completaron una de sus actuaciones
más brillantes para superar la eliminatoria. Son las dos últimas noches mágicas europeas del
estadio. Antes había habido otras de sonadas.
La noche de 'Pichi'
Posiblemente, la más increíble de todas fue la del 16 de abril de 1986. En las
semifinales de la Copa de Europa, el Barça tenía que dar la vuelta a un 3-0 al Goteborg para estar
en la final de Sevilla. Un hattrick de Pichi Alonso posibilitó que el billete se decidiera en los
penaltis, donde un Urruti estelar guió al equipo al triunfo. Cuando Víctor marcó la pena máxima
definitiva el Camp Nou explotó. "Si esta eliminatoria fuera una novela, estoy seguro de que el
editor la habría tirado a la papelera porqué no se habría creído el final", declaró el entrenador
Terry Venables tras el encuentro.
Zuviría provoca el éxtasis
Igual o
más difícil se presentaba el panorama en la vuelta de los dieciseisavos de la Recopa 1978/79. El
Barça estaba contra las cuerdas, con un 3-0 adverso contra el poderoso Anderlecht. El ambiente en
el estadio fue infernal. Los azulgrana marcarían tres goles en momentos clave: Krankl al principio,
Heredia a pocos segundos del descanso y Zuviría en el minuto 86. El delirio se consumó en los
lanzamiento de los penaltis, en los que el Barça fue mucho más efectivo (4-1). Basilea quedaba más
cerca.
El primer milagro
Menos recordada es la primera gran remontada europea en casa. Fue en los
octavos de final de la Copa de la UEFA 1977/78, ante el Ipswich Town de Sir Bobby Robson. Pocos
confiaban en superar el 3-0 de la ida, pero los goles de Cruyff, por partida doble, y otro agónico
de Rexach resucitaron el Barça. Los penaltis dictaron sentencia y el portero Artola se erigió en el
héroe al parar los dos lanzamientos iniciales de los ingleses.