
06.05.2010 10:29
Sandra Sarmiento
Hace un año del gol de Andrés Iniesta en Stamford Bridge, que catapultó al Barça a la final de Roma e inició el camino de las 6 copas en el año 2009.
El '6 'del Dream Team remató de cabeza un centro imposible de Koeman el
6 de noviembre de 1991 cuando los alemanes del Kaiserlautern habían dado la vuelta la eliminatoria
de la Copa de Europa. Wembley siempre irá ligado a Koeman y al gol del corazón del Barça de Cruyff.
Hace un año, Andrés Iniesta se transformó en el nuevo Bakero con un disparo perfecto desde la
frontal del área defendida por Cech.
A veces el destino tiene historias curiosas. Quizás el jugador que tenía
menos contundencia para el gol se encontró con la gloria inesperada. "Andrés, que nunca la mete, la
metió por la escuadra. Es talento puro y azar. Se lo merecía". Son palabras de Pep Guardiola en la
sala de prensa de Stamford Bridge, después de correr enloquecido por la banda para celebrar el gol
de uno de sus futbolistas favoritos. "Le pegué al balón con toda mi alma, me ha salido perfecto",
confesó orgulloso el centrocampista de Fuentealbilla.
El gol agónico de Iniesta desató la euforia en Barcelona. Miles de
personas salieron a las calles para celebrar el éxito del equipo de Guardiola. Era la segunda
fiesta en cuatro días después del 2-6 en el Bernabéu y no sería la última. El Barça llegaría de
madrugada al aeropuerto de El Prat, pero decenas de aficionados quisieron homenajear a los que,
días después, serían tricampeones.
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