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18.09.2009 15:29

Del Infantil B al trono mundial

Sandra Sarmiento / Jaume Marcet

De Rosario a Barcelona. De la Masía al Camp Nou. Y del Camp Nou al Olímpico de Roma. Una trayectoria de nueve años en el Barça para convertirse en el mejor futbolista del planeta.

Nació en Argentina, pero se ha hecho como futbolista en la Masía. Ya de pequeño, cuando con 13 años llegó a Barcelona al lado de su padre, se intuía que sería un jugador atrevido, genial. Un bajito delantero que ha crecido hasta convertirse en el mejor futbolista del planeta.

El año 2001 Leo Messi dio sus primeras pasos en el fútbol base azulgrana. Su primer equipo fue el Infantil B de Xavi Llorens.

Un ascenso meteórico en el fútbol base

Después de superar una grave lesión y unos problemas burocráticos que le impedían jugar, Messi deslumbró con su fútbol en el Cadete B de Cesc y Piqué. Después de un año entero en el Cadete A, donde lo ganó todo en la temporada 2002/03, en la temporada siguiente rompió todos los registros al jugar en pocos meses en cinco categorías diferentes.

Su debut en partido amistoso con el primer equipo llegó en Portugal, en el campo del Oporto, en un partido donde ya demostró que en breve su lugar podía estar junto a grandes cracks como Deco o Ronaldinho.

Debut en Montjuïc

Capaz de pasar de 0 a 100 en pocos segundos y con el balón enganchado a los pies, Messi se plantó en el primer equipo en un derbi contra el Espanyol, en octubre del 2004. Pocos meses después se estrenó como goleador contra el Albacete, en un Camp Nou emocionado, alucinado porque su juego evoca el fútbol auténtico. Una auténtica joya.

Punto de inflexión en el segundo año

El gran salto de Messi, sin embargo, llega en un escenario importante: el Santiago Bernabéu, el día en el que Ronaldinho llegó a la cima del mundo futbolístico. Aquel 20 de noviembre del 2005, Messi también fue protagonista de una noche mágica para los culés. Fue titular en detrimento de Ludovic Giuly y maravilló a media Europa.

Fue el punto de inflexión para ir creciendo a una velocidad vertiginosa, sólo frenado por las malditas lesiones musculares que en su segunda temporada con el primer equipo no le dejaron gozar de la final de París.

Disfrazado de Maradona y primer hat-trick al Madrid

Los dos últimos años de la etapa Rijkaard, Messi ya se hizo grandioso en el primer equipo. No había nacido cuando Diego Armando Maradona se convirtió el 24 de junio de 1986 en México en el ‘barrilete cósmico'. Pero el ‘19’ del Barça se disfrazó de Diego en una jugada antológica contra el Getafe el 18 de abril del 2007.

Y corriendo más rápido que nadie y con sólo 19 años, el delantero argentino completó un partido excepcional contra el rival histórico. Un partido que se recordará como el día en el que Messi hizo un hat-trick al Madrid.

En el cielo de Roma

El 2009 es el año del Barça del triplete y el año de Messi. Ya ha llegado al podio de los grandes del fútbol por las jugadas del Sánchez Pizjuán en la primera vuelta de la Liga, para decidir en los grandes partidos, para hacer el gol cinco mil en El Sardinero de Santander, pero, sobre todo, para volar más alto que nadie en el Olímpico de Roma. Leo ha llegado a la cima para quedar-se en ella muchos años y ya es el ‘10' del Barça. Como mínimo, hasta el 2016 .