03.11.2009 12:40
Recuperación en el hotel
Marc Guillén / Vanessa Forns
Después del largo viaje hasta Kazan, los jugadores han pasado esta mañana descansando en el hotel de concentración. Sólo algunos miembros del cuerpo técnico se han animado a dar una paseo por la ciudad tártara.
Mañana de descanso a Kazan. A pesar de que había la posibilidad de que el FC
Barcelona hiciera esta mañana un primer entrenamiento, finalmente, y teniendo en cuenta el
retraso del vuelo
que lo trasladó hasta la ciudad tártara, se ha aplazado la primera toma de contacto con el
terreno de juego del Centralniy hasta esta tarde. Un terreno de juego que dispone de calefacción,
un hecho que sin lugar a dudas contribuirá a hacer que el césped esté en buenas condiciones para el
partido del miércoles.
Mañana libre
Y es que después de que el equipo llegase al hotel de concentración hacia las 23 horas, la
mejor opción para que los jugadores se adapten al horario y al clima de Kazan es el descanso. Así
pues, la plantilla barcelonista se ha levantado este martes por la mañana para desayunar todos
juntos a las 10.30 horas. Seguidamente, todos los miembros del Barça disponían de la mañana libre.
El cuerpo técnico sale a pasear
Aunque los jugadores se han quedado en el hotel, algunos miembros del cuerpo técnico
azulgrana,
muy abrigados
, entre los cuales no estaba Josep Guardiola, se han animado a dar un paseo para conocer la
que, desde el abril del 2009, es considerada la tercera capital de Rusia por detrás de Moscú y San
Petersburgo.
Y lo que se han encontrado es una ciudad nevada, muy limpia, y con calles muy
comerciales, y con una temperatura máxima de 0 grados que a medida que avance el día podría
disminuir hasta los 6 grados bajo cero. Sin duda, uno de los principales atractivos de Kazan es el
impresionante Kremlin, del siglo XVI, con su característica cúpula azul, que es Patrimonio de la
Humanidad.
La tercera capital de Rusia
El hecho de haberse ganado el título de tercera capital de Rusia ha ayudado
muchísimo a la primera ciudad del Tataristán a aumentar su atractivo turístico. Entre sus
visitantes, destaca el elevado número de rusos de religión musulmana que consideran Kazan un lugar
de peregrinaje. En Kazan conviven musulmanes y cristianos ortodoxos y se puede decir que se trata
de una ciudad bilingüe, con el ruso y el tártaro como lenguas oficiales.