Víctor Valdés va camino de recoger su cuarto trofeo Zamora, tercero consecutivo, como portero menos goleado del campeonato. Si mantiene la portería a cero contra el Málaga cerrará la temporada con un coeficiente de 0,48 goles encajados.
Debutó en la primera jornada de la temporada 2002/03 en un Barça-Atlético de Madrid, pero no fue
hasta la segunda vuelta de la siguiente, 2003/04, cuando se consolidó definitivamente como titular.
Ya son, pues, ocho campañas en las que el portero de L'Hospitalet es el amo y señor de una de las
porterías más complicadas de la Liga.
Su mejor registro
Valdés ha encajado 16 goles en 32 jornadas, es decir, acumula una media
de 0,5 goles por partido. Unas cifras que superan las conseguidas hasta ahora. La primera temporada
que terminó como portero menos goleado, la 2004/05, firmó un coeficiente de 0,71. En 2009 fue de
0,89 el año pasado cerró la Liga con 0.63.
A un paso del récord de la Liga
El gol que el Barça recibió en el Ciutat de València contra el Levante
impidió a Valdés poder alcanzar el récord de la historia de la competición que, hoy por hoy,
ostenta el entonces portero del Deportivo Paco Liaño. El cantábrico terminó la temporada 1993/94
con un coeficiente de 0,47 goles por partido y el de Valdés, si no acabara imbatido en Málaga,
sería de 0,48. De todos modos, el azulgrana tiene al alcance el segundo mejor registro del
campeonato.
Supera un mito
Con cuatro trofeos en el bolsillo Víctor Valdés ya supera el mítico portero que da nombre al
galardón, Ricardo Zamora, que sumó tres los años 1929, 1932 y 1933. El legendario portero azulgrana
de los años 50 y 60 Antoni Ramallets es de momento quien lidera la tabla con cinco trofeos Zamora
en su vitrina particular.