28.05.2011 22:44
Wembley once again
David Saura (enviado especial)
Lección de fútbol en el templo del fútbol. El Barça recupera el reinado de Europa con una exhibición de fútbol nunca vista en una final. La cuarta Champions ya está en el saco de un club que es la envidia del mundo del deporte.
Guardiola prometió que los jugadores no fallarían. Y no lo han hecho. El
Barça más admirado de la historia se ha graduado en la catedral del fútbol
europeo. Con estilo, con una superioridad aplastante, con un modelo de juego que está en los genes
de la
Masía. Y lo ha conseguido contra uno de los clubes más admirados de Europa, el
Manchester United, que ha sufrido un golpe durísimo a su imagen.
Wembley ha vuelto a guiñar el ojo al FC Barcelona, en una combinación perfecta de tradición y
modernidad. Del
antiguo Wembley, al nuevo. Del campo donde el mítico
Dream Team de Johan Cruyff se bautizó en
Europa, al nuevo estadio londinense, símbolo de la esencia del fútbol mezclada con
la modernidad del siglo XXI. El fútbol de inspiración romántica da paso a un fútbol de vanguardia.
Sólo 19 años separan este trayecto.
A la altura de los clásicos
En estas dos décadas, los clubes hegemónicos de la Champions han abierto la puerta
también al Barça. Ya tiene cuatro, una cifra que empieza a hacer justicia a la tradición y el peso
específico de una institución como esta, que merece, como mínimo, estar a la altura de los
clásicos. Y ha llegado a este estatus en un sprint contemporáneo, de la mano de Johan
Cruyff, Frank Rijkaard y Josep Guardiola. Los tres entrenadores dan un hilo de
continuidad a esta historia, ligada con coherencia y una manera similar de ver el fútbol.
Pero, sin duda, ha sido Guardiola quien ha sacado más brillo a la fórmula del éxito que
inventó Cruyff. El técnico de Santpedor ha impregnado de tinta el tampón identitario del equipo,
sólo así se entiende que se pueda alinear de inicio a 7 jugadores de casa en dos finales
consecutivas de la Liga de Campeones. Ha puesto los jugadores al servicio del equipo, con una
defensa trabajada que -aunque parezca contradictorio- da sentido al juego ofensivo. Ha sabido sacar
el máximo rendimiento a los cracks, con empatía y dotes innatas para la comunicación. Todo
aderezado con más horas de laboratorio que nadie. Sólo con esta manera de hacer se explica que ya
haya sumado 10 títulos como entrenador con sólo 3 años en el banquillo del Barça. Precisamente el
décimo título es lo que le da un salto cualitativo en su trayectoria: es el primer entrenador
azulgrana con dos Champions en su palmarés. Y todo con mucha precocidad. De hecho, con 40 años, es
el entrenador más joven que ha levantado dos veces la orejuda, superando José Mourinho.
La figura de Guardiola también se agranda junto a la de
Ferguson. El técnico en activo más laureado del fútbol europeo está a punto de
ceder el relevo al técnico del Barça. El entrenador galés encarna como pocos los valores de un club
-algunos hablan del 'Ferguson United'-, una característica también válida para Guardiola que,
además, aporta un estilo y una manera de jugar irrenunciable, lo que no está tan claro en el caso
de los Red Devils. El Barça siempre es reconocible, con una manera de hacer envidiada.
Cracks universales
Sería injusto hablar del éxito de este Barça sin hacerlo de sus jugadores.
Guardiola tampoco nos lo perdonaría. Hablar de Messi, Iniesta, Xavi, Villa, Pedro, Piqué... los
nombres que todos los niños que sueñan con el fútbol tienen hoy en la cabeza. Pero por encima de
todo, el mundo hablará de Messi. El argentino prometió que hablaría, y lo ha hecho sobre el césped,
de la mejor manera que sabe hacerlo, con un gol, el 53 de la temporada y el 12º de la Champions,
récord absoluto de la competición.