Hace cuatro años, uno de los mejores laterales del mundo, el francés Éric Abidal, firmaba por el Barcelona procedente del Olympique de Lyon. En cuatro temporadas, ‘Abi’ se ha convertido en un símbolo para los barcelonistas.
La baja de Gio van Bronckhorst al finalizar el curso 2006/07 aceleró la contratación
de Abidal. El holandés marchó hacia Rotterdam para jugar con el Feyenoord y la banda izquierda
necesitaba un jugador de garantías como el galo. El 29 de junio del 2007 Éric Abidal era presentado
como nuevo jugador del FC Barcelona.
Primer año sin títulos
En su primera temporada, la 2007/08, el ‘22’ juega más minutos que
nunca, y se convierte así en indiscutible para Frank Rijkaard. El equipo llega hasta las
semifinales de la Copa del Rey y de la Champions, casi siempre con Abidal como propietario del
lateral izquierdo azulgrana.
Éxitos con Guardiola
Con la llegada de Pep Guardiola al banquillo del primer equipo, Abidal se consolida como un
puntal de la defensa catalana. Aún así, dos inoportunas expulsiones hacen que se pierda la final de
Copa en Mestalla y la final de la Champions 2008/09, en Roma .
En la temporada 2009/10 comparte posición con Maxwell, pero una grave lesión en el abductor
del muslo izquierdo le pasa factura y le deja casi sin jugar la segunda vuelta de la Liga.
Erigido en ejemplo
EI último curso ha sido de contrastes. Abidal, de 31 años, ha ofrecido su mejor
versión como azulgrana, tanto de lateral izquierdo como de central. En el mejor momento de su
carrera recibe la peor noticia: el 15 de marzo se le diagnostica un tumor hepático, por el cual
tiene que ser intervenido. Mes y medio más tarde le llega el mejor regalo para él y para el
barcelonismo: Abi, con una gran ovación, volvía a pisar el Camp Nou la noche en que el equipo se
clasificaba para la final de la Champions. Seria él quien lo levantaría.
Si algo queda claro es que en estos cuatro años, con su fútbol y su vitalidad, el
‘22’ del Barça se ha ganado el corazón y el respecto de todos los ‘cules’.