02.07.2010 12:24
Tres años de despliegue físico y técnico
Jordi Clos
Touré Yaya deja la disciplina azulgrana después de haberse convertido en uno de los símbolos del Barça de las Seis Copas. En las tres temporadas que ha jugado en el Camp Nou, el marfileño ha demostrado ser un futbolista comprometido y polivalente.
El primer marfileño de la historia dejará una huella muy profunda en la entidad. En tres temporadas
(2007-10) Touré Yaya ha sido actor principal del mejor Barça de la historia, el que ha conseguido
dos Ligas, una Champions, una Copa, el primer Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa y una
Supercopa de España. Durante este período ha jugado habitualmente de mediocentro, aunque no ha
desentonado cuando lo ha hecho de pivote o incluso de central. Touré ha demostrado tener unas
condiciones físicas (1,91 m) y técnicas excepcionales que le permiten ser un baluarte tanto en
ataque como en defensa.
Una gran revelación
El centrocampista
fichó por el Barça el verano del 2007 procedente del Mónaco. Aunque sólo tenía 24 años, en el Camp
Nou iniciaba su quinta aventura europea. Su adaptación fue rápida. En sus dos primeros partidos en
el estadio, en el Trofeo Joan Gamper y contra el Athletic Club, ya dejó clara una de sus mejores
virtudes: el disparo lejano. Indudablemente, una lesión muscular en el campo del Levante (J 6) y la
disputa de la Copa de África frenaron la progresión. Sobre todo porque volvió de esa competición
con problemas en la espalda. Sin embargo, haciendo gala de una gran entrega, siguió jugando hasta
final de temporada, cuando se operó.
Frank Rijkaard le alineó en 38 partidos (26 de Liga, 3 de Copa y 9 de Champions) en los que
marcó dos goles.
Central en Valencia y en Roma
Con la
llegada de Pep Guardiola en el banquillo, el rol de Touré Yaya en el equipo siguió creciendo. De
hecho, fue una pieza básica en el Triplete al jugar 43 enfrentamientos (25 en la Liga, 6 de Copa y
12 de Champions). Se ganó el cariño perpetuo de los culés gracias a las nuevas exhibiciones de
compromiso al actuar de central en duelos decisivos. En la final de Valencia, además, Touré Yaya
marcó un golazo que significaba el empate a uno contra el Athletic Club. Para el recuerdo también
quedará la batalla épica que mantuvo con su compatriota Didier Drogba en la vuelta de las
semifinales de Champions en Stamford Bridge. En la final, con un Barça con muchas bajas detrás,
volvió a estar impecable en el eje de la defensa junto a Piqué.
Termina de pivote
En
su tercera temporada, Touré Yaya ha seguido siendo uno de los pilares del conjunto azulgrana,
aunque la Copa África, de nuevo, y la consolidación de Busquets como mediocentro le han restado
minutos. Ha participado en 37 partidos oficiales y ha ampliado su palmarés con cuatro copas más
(Liga, Mundial de Clubes, Supercopa de Europa y Supercopa de España). Pep Guardiola le ha colocado
en más de una ocasión en el doble pivote. Esta fue su ubicación en el que habrá sido su último
encuentro con el Barça, ante el Valladolid. Un adiós por la puerta grande.