30.07.2010 23:55

"Me siento orgulloso de ser de Fuentealbilla"

Núria Barnils/ Miquel Agut

Andrés Iniesta ha recibido un doble homenaje en Albacete y Fuentealbilla, su pueblo natal. El azulgrana se ha mostrado orgulloso de sus raíces

La capital manchega, en primer lugar, y el pueblo donde se ha criado Iniesta se han paralizado para rendirle un gran homenaje en un día que el azulgrana recordará durante mucho tiempo.

Orgulloso de sus raíces

Con la piel más morena de lo habitual y muy emocionado, el azulgrana se ha dirigido advirtiendo que se siente mejor jugando al fútbol que ante los micrófono y ha afirmado que es un gran día para él: "Es un día de muchas emociones y con esta espectacular recibimiento, me siento aún más orgulloso de ser de Fuentealbilla ". El jugador del Barça ha afirmado estar orgulloso de llevar el nombre del pueblo todo el mundo y ha acabado siendo ovacionado y aclamado por los habitantes del pueblo manchego después de sus últimas palabras: "Soy castellano-manchego, soy de Albacete, pero, sobre todo , soy de Fuentealbilla ". Tras el discurso del manchego, ha inaugurado un monumento conmemorativo con la forma de la copa del mundo. La celebración de unos fuegos artificiales y el baile con una orquesta han cerrado los actos.

Fuentalbilla se viste de Iniesta

Iniesta se ha dirigido esta noche en el pueblo que le vio crecer y de donde ya es hijo predilecto, Fuentealbilla, en un coche escoltado por la guardia civil. En esta pequeña localidad, en el que el azulgrana tiene una casa en una calle con su nombre, Iniesta ha recibido la medalla de oro del ayuntamiento. Las calles del pueblo natal del jugador del Barça, han sido completamente teñidos por las camisetas del club azulgrana y también de la selección española con el nombre de Iniesta grabado detrás. Los más afortunados, incluso, llevaban la firma del jugador.

Multitudinaria acogida en Albacete

Antes de los actos en Fuentealbilla, la ciudad de Albacete ha nombrado el centrocampista azulgrana hijo adoptivo de la capital manchega en un acto multitudinario, en el que se calcula que ha asistido unas 7.000 personas. Al dirigirse a los aficionados, Iniesta ha explicado cómo se sintió el día 11 de julio, tras marcar el gol que dio la Copa del Mundo en España: "Toqué la gloria y acaricié el cielo". A continuación el Albacete Balompié le ha entregado la insignia de brillantes del club donde el azulgrana ingresó con 8 años de edad antes de fichar por el Barça 4 años más tarde.