Éric Abidal se sintió cómodo en la posición de central durante el amistoso en Pekín contra el Guoan y, por tanto, se convierte en otra opción para Josep Guardiola de cara a la próxima temporada.
Para esta temporada Josep Guardiola dispone de tres centrales, Milito, Piqué y Puyol. Pero, aun
así, aprovechando el amistoso en Pekín contra el Beijing Guoan, el técnico de Santpedor situó a
Éric Abidal en el eje de la defensa. Una posición en la que está más acostumbrado a jugar con la
selección, pero en el que es menos habitual verlo con el Barça: "Me gusta jugar de central. Es el
lugar en que juego a la selección, y seguramente que tácticamente es diferente que jugar aquí".
Aunque ha explicado que tras el partido Guardiola le rectificó dos cosas, la sensación después del
encuentro fue buena.
Todos a trabajar para el primer título
En cuanto a la preparación del primer título, la Supercopa de España,
Abidal sabe que "es difícil para nosotros preparar estos partidos. Nos falta mucha gente, ya que
después de la gira algunos han ido otra vez con la selección". Pero ha añadido que aquí no tiran
ningún título: "Estamos aquí para tratar de estar al máximo el día 14. Somos un grupo y estamos
para ayudar todo el equipo. Los jugadores que estamos aquí trabajamos y los que no están piensan en
este partido porque saben que es importante".
Elogios hacia el plantel
Durante la gira, los jugadores de la cantera han tomado el protagonismo ante la ausencia de
algunos futbolistas del primer equipo. "Creo que son jugadores de talento que han demostrado que se
adaptan muy bien a la táctica del míster y al juego del Barça". Y no esconde su confianza de cara
al futuro de estos chicos: "Me gustaría que ficharan por el primer equipo con contrato profesional,
pero eso no depende de mí. Deben seguir trabajando para ver que pasa con ellos".
Abidal, en la rueda de prensa de este martes. Foto: Miguel Ruiz - FCB
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Pendiente de la selección
Abidal, que no ha sido convocado para el amistoso que Francia jugará este miércoles, ve su ausencia
como "una sanción. Y es que el 17 de agosto el francés tiene que comparecer ante la Federación
Francesa de Fútbol para dar su opinión sobre lo que pasó a la selección durante el Mundial de
Sudáfrica: "No sé si me sancionarán. Escucharé las preguntas y responderé lo que pienso". Pero ya
ha explicado que "a pesar de no entrenar durante un par de días, no he dicho nada".