Un numeroso grupo de aficionados azulgrana han recibido al equipo en su primer entrenamiento. Aunque era una sesión cerrada, la sesión ha contado con bastante público en la Southern Methodist University (SMU).
A pesar del calor que hacía, con más de 40 grados, el público esperaba con entusiasmo la llegada de
los jugadores del Barça, que hacían el primer entrenamiento en la ciudad de Dallas, en el campo
Wescott Field de la SMU. La gran mayoría han podido seguir, durante cerca de una hora, la sesión
del Barça, desde fuera de las vallas del estadio o desde un edificio adyacente al campo de
entrenamiento.
Jornada larga y entrenamiento suave
Después de un día muy largo (los jugadores se han levantado a las seis de la mañana
en Miami) y con un vuelo de cerca de una hora y media incluido, la sesión ha sido relativamente
suave, con rondos y un ejercicio de pases y control de balón. A pesar de la derrota en el Sun Life
Stadium, el buen ambiente ha sido la tónica habitual.
El entrenamiento ha tenido un enfoque diferente para algunos jugadores, como por ejemplo
Carmona, que ha trabajado de forma individual por una contusión en el pie derecho que recibió
contra el Chivas. Como ya pasó en Miami, Maxwell y Puyol también han hecho ejercicios por su
cuenta, mientras que
Muniesa, con una lesión muscular
que le tendrá de baja durante tres semanas, lo miraba desde la banda. Afellay, también
lesionado, se ha quedado en el hotel.
Los jugadores que dispusieron de más minutos en el partido del miércoles, como Keita, Abidal,
Jonathan, Thiago y Cuenca han hecho la parte final de la sesión con menos intensidad que el resto
de compañeros.
Sin sol pero con mucho calor
El entrenamiento ha comenzado tarde, a las ocho, cuando el sol ya se había puesto.
Con todo, el calor era considerable, con más de 40 grados centígrados, y los jugadores han tenido
que hidratarse de forma continuada. De todos modos, el ambiente era menos húmedo que en Miami,
donde la sensación de bochorno era muy elevada.