El Real Madrid en la final de la Supercopa de España, el Nápoles en el Gamper, el Oporto en la final de la Supercopa de Europa y el Villarreal, ya en Liga, han sido los cuatro rivales de Champions contra los que el Barça se ha enfrentado este mes. Los cuatro han acabado con victoria azulgrana, y dos de ellos, con la consecución de los dos primeros títulos de la temporada: la Supercopa de España y la Supercopa de Europa.

Primera parada, Supercopa de España

El Barça empezó la temporada 2011-2012 con un plato fuerte, la Supercopa de España, y con un clásico contra el Real Madrid.

El partido de ida en el Santiago Bernabéu, donde los de Guardiola consiguieron un trabajado empate a 2, con goles de Villa y Leo Messi, sirvió para empezar a coger fuerza en las piernas, y también para poder ver debutar al primer chileno azulgrana, Alexis Sánchez.

El 17 de agosto de 2011, el Camp Nou fue testigo de la consecución del primer título de la temporada. Un gol de Iniesta que abría el marcador y un doblete de Messi, lograron hacer frente a los dos goles de Cristiano Ronaldo y Benzema. Además, este partido tendría un significado especial para el nuevo '4 'del Barça, Cesc Fábregas, que estrenaría la camiseta azulgrana.

El Barça se luce en el Gamper

A partir de aquí las victorias se han ido sucediendo una tras otra. El Nápoles fue el rival en el trofeo Joan Gamper, en la presentación oficial de este gran Barça. Los azulgranas consiguieron la primera manita de la temporada. 5-0. Cesc Fábregas marcó el primer gol del partido, y su primero como azulgrana. A esta diana, los seguirían los goles de Keita, Pedro y el doblete de Leo Messi.

Supercampeones de Europa

Después del Gamper, el Barça viajó a una de las ciudades con más 'glamour', Mónaco para disputar el segundo título de la temporada, la Supercopa de Europa contra el Oporto. Un gol de Messi en el minuto 38 y otro de Cesc en el 87, coronaron el Barça supercampeón de Europa.

Estreno en liga, con goleada ante el Villarreal

Y el Camp Nou volvió a ser testigo de otro goleada a un equipo de Champions, el Villarreal. Apostando por un 3-4-3 los azulgranas decidieron el partido con un 5-0, en una exhibición que sirvió para que Thiago, Fàbregas y Alexis Sánchez reafirmaran el por qué de su llegada al Barça. Sus goles, junto con un doblete, de Leo Messi, mostraron la cara más competitiva de un Barça, que a pesar de haberlo ganado todo, continúa con el espíritu competitivo, intacto, y las mismas ganas de seguir haciendo historia.