El Barça juega este miércoles con el campeón de Bielorrusia por primera vez. Nunca los azulgranas han jugado en este país. El siete veces ganador de Liga participa por segunda vez en la fase de grupos de Champions.
El serbio Mateja Kezman es la referencia ofensiva del equipo. Foto: www.uefa.com
Juegan en Minsk
La UEFA no autorizó el año 2008 el campo del BATE, el estadio Gorodskoi de Borisov, por sus
dimensiones y por no disponer de los servicios mínimos para acoger un partido de la Champions.
Tanto en su primera participación como este año el BATE tiene que jugar sus partidos en el estadio
del Dinamo, de la capital del país, que tiene un aforo de 37.000 espectadores.
El BATE fue fundado en 1996 y tres años más tarde ganó su primera Liga. Los compatriotas del
todavía azulgrana Alejandro Hleb -ahora cedido al Wolfsburgo alemán - son el equipo de referencia
en la república surgida de la escisión de la Unión Soviética en 1991. El conjunto de Borisov ha
ganado siete Ligas, dos Supercopas y dos Copas. En el año 2008, en el mes de agosto, logró lo que
hasta ahora es su máximo triunfo: participar por primera vez en la fase de grupos de la Liga de
Campeones.
Colista y eliminado
A pesar de las perspectivas de hacer un papel digno, el BATE no tuvo mucha suerte
en el sorteo de aquella primera fase de grupos. El Real Madrid, la Juventus de Turín y el Zenit
ruso, que llegaba como campeón de la UEFA y la Supercopa europea fueron sus rivales. Los
bielorrusos no pudieron ganar ningún partido de los seis jugados, pero empataron en el campo de la
Juventus y del Zenit y, como locales, empataron también ante los italianos.
El actual BATE
Para llegar a la Champions League, el conjunto de Víctor Gorcharenko eliminó a tres
rivales. El mes de julio se deshizo del campeón de Irlanda, el Linfield. La siguiente estación de
la Champions le llevó hasta Lituania para competir con el Ekranes y, en la tercera ronda,
denominada desde el año pasado de play-off, se deshizo del Sturm Graz austriaco, sin perder ninguno
partido de los seis jugados.
Su imbatibilidad sigue intacta después de la primera jornada de la fase de grupos, ya que el
rival azulgrana de esta noche empató en el campo del Pilsen checo a un gol.
Dos serbios y dos brasileños
La plantilla del BATE está, en su gran mayoría, formada por jugadores del propio
país. La media de edad es muy joven y la mayoría de los jugadores locales son internacionales
absolutos por Bielorrusia o por la selección sub-21, tercera clasificada en el último campeonato,
sólo superada por España.
En cuanto a la representación de otras nacionalidades destaca la presencia del serbio Mateja
Kezmann, un gran goleador que tiene experiencia en la Champions. Ha jugado en el PSV, Chelsea,
Atlético de Madrid, PSG, Fernerbahçe y Zenit y ha sido máximo goleador en Serbia y Holanda. El otro
serbio del equipo es Marko Simic, ex jugador del Partizán y que juega de defensa. Los dos
brasileños son Renan Bressan y Alex Porfirio. El primero es delantero y marcó el primer gol de la
liguilla de este año ante el Pilsen.