El sábado se vivió en el campo del Castelldefels una muestra de 'fair play' por parte de los chicos de Sergi Barjuan, cuando tras una jugada polémica dejaron marcar al rival sin ninguna oposición.
Este gesto demuestra que, por encima de los resultados deportivos, los valores de la cantera
azulgrana van mucho más allá.
El mismo partido que hace un año
Los chicos del Juvenil B disputaron, este sábado, un partido contra el
Castelldefels que correspondía a la 28ª jornada de Liga. El encuentro se planteó difícil desde el
primer minuto, porque ninguno de los dos equipos conseguía llegar de manera determinante a la
portería rival. Sergi Barjuan, en declaraciones a Barça TV, asegura: "Ha sido un calco de lo que
pasó el año pasado. Ellos han utilizado el mismo estilo de juego, y la misma intensidad. En la
primera parte hemos tenido dos ocasiones claras, y en la segunda hemos tenido más. Podríamos haber
firmado la victoria, pero el balón no ha entrado." También se mostraba satisfecho y optimista: "Los
chicos han trabajado mucho; además, el resultado del año pasado fue el mismo (1-1) y ganamos la
Liga; ojalá se repita."
La jugada polémica
La jugada polémica llegó a pocos minutos del final, cuando el defensa Carlos Julio
Martínez disparó el esférico casi desde fuera del área mientras el portero del Castelldefels estaba
tendido en el suelo. Afición y jugadores reclamaron la decisión del árbitro de dar por válido el
gol. Sergi Barjuan, desde el banquillo, mandó a sus jugadores que renunciaran a la victoria y
dejaran que Dani López firmara el empate. "No había más remedio, nos teníamos que dejar empatar.
Somos un equipo modélico en el ámbito catalán, español, europeo y mundial y estos hechos ayudan a
hacer fuerte a la cantera."
Finalmente, el'speaker' del campo del Castelldefels agradeció "el gesto" y la afición local
ovacionó la salida de los jugadores azulgranas.