03.02.2009 18:54
La resistencia, a examen
Cristina Collado
El cuerpo técnico de la plantilla del Barça Mobicat ha puesto a prueba la resistencia de sus jugadores con el Test de Probst. Una medida entre la distancia recorrida, la frecuencia cardiaca y el nivel de lactatos determina la resistencia del jugador.
Ya se hizo en la pretemporada, y ahora, inmersos en la segunda vuelta de la Liga, se vuelve a
repetir. El Test de Probst permite medir la resistencia del deportista. Es parecido a la
‘course navette', pero más específico para el fútbol sala: “El Probst tiene una
particularidad que no tiene la ‘course navette': es el esfuerzo discontinuo. Después de cada
carrera, el esfuerzo se para. Se asemeja más al que se encontrarán después en un partido de fútbol
sala”, explica el preparador físico del equipo, Juanma Ruiz.
Esfuerzo incremental
El test consiste en un circuito que los jugadores tienen que
recorrer tres veces en un tiempo determinado. Después, tienen 30 segundos de descanso que se
aprovechan para extraerles del lóbulo de la oreja una muestra de sangre que da una medida de
lactato. Reanudan entonces la carrera, pero cada vez tienen que incrementar la velocidad para
acabar el circuito a tiempo.
“Vemos la distancia que pueden recorrer, la frecuencia cardiaca en cada momento y
hacemos una medida de lactatos. Así sabemos donde está el umbral anaeróbico necesario para entrenar
para que los jugadores tengan más resistencia en los partidos”, explica el doctor del equipo,
Daniel Florit.
¿Qué es el lactato?
Para entender qué es el lactato, ésta es la explicación del
médico del Barça Mobicat: “Es un producto que se produce en los músculos cuando se trabaja
con intensidades altas, que hace que el metabolismo no pueda ser aeróbico. Es decir, se produce
cuando el metabolismo no puede trabajar únicamente con oxígeno, sino que tiene que trabajar con
glicólisis anaeróbica, que es una vía que como producto final produce lactato.”
Recuperación
Una vez el jugador ha detenido la prueba (en la mayoría han
llegado casi a la quinta ronda) le toman dos medidas más de lactato. Una al minuto de haber
concluido la prueba y la otra a los tres minutos. Es la manera de medir la recuperación de los
jugadores.
Mejores datos
Respeto a la prueba que ya superaron los jugadores en la pretemporada, ahora los datos tienen
que mejorar. Los seis meses de competición hacen que los jugadores aguanten más el esfuerzo:
“Ahora tendría que haber menos acumulación de lactato para una velocidad determinada. Tienen
que aguantar más, tienen que tener mejor tolerancia, es decir, tienen que poder seguir trabajando a
pesar de que el lactato sea muy alto.”