El conjunto de Carmona tiene una excelente oportunidad de volver a la primera plaza, pero es consciente de que enfrente se encontrará una pista siempre complicada, con un buen ambiente y un rival necesitado de puntos y las garras afiladas.

A pesar de la diferencia de puntos que separa ambos conjuntos en la clasificación, no se prevé un duelo desequilibrado. Cartagena vive un buen momento, pese a caer la semana pasada en Manacor, y en su pista ha ganado los dos últimos partidos.

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Después de encarar de manera prácticamente definitiva la eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey (2-9 en Lugo), los azulgranas quieren aprovechar la buena dinámica para no fallar hoy en el pabellón Wsell de Guimbarda, escenario que acoge los partidos de Reale Cartagena.

El equipo de Carmona no ha podido recuperar al segoviano Lin, que sigue con problemas físicos. Tampoco ha viajado Ari Santos, por lo que el técnico ha incluido en la lista el joven Sepe. En duelo de la primera vuelta, los azulgranas se impusieron 6-3.

El rival

La incorporación del corpulento pívot brasileño Beto es una de las claves para entender la mejora de rendimiento de un Cartagena que tiene poco que ver con el equipo poderoso que luchó por la Liga hace unos años (un equipo, por cierto, donde jugaban Cristian y Jordi Torras). No obstante, se trata de un clásico de la categoría y que luchará duro para no perder su plaza en la División de Honor.

Conscientes de ello, los de Luis Fonseca saben que arañar todos los puntos posibles en su cancha es clave para lograr la permanencia. La temporada pasada ya dieron un disgusto al FC Barcelona (2-1). Los locales cuentan con la baja de Luis Jara, operado recientemente del pubis.