El capitán del Xacobeo Lobelle Santiago es mucho más que un jugador. Alemão es el alma del equipo gallego y el eje del ataque de los de Tomás de Dios. "Tiene algo diferente y habrá que estar muy encima suyo", reconocen dentro del vestuario del Barça.
Su último año en la LNFS
Alemão anunció recientemente que a finales de temporada dejará la disciplina de Lobelle, club en el
que ha militado las últimas ocho temporadas. El hispano-brasileño anunciará, una vez acabe el
play-off, su próximo destino, probablemente la liga brasileña, donde pondrá punto y final a su
trayectoria. La afición de Lobelle le ha homenajeado en los últimos partidos jugados en el pabellón
Fontes do Sar.
Buena parte de las opciones de Lobelle pasan por las botas de Julio César Simonato Cordeiro, más
conocido en el mundo del fútbol sala como Alemão. El hispano-brasileño, nacido en Río de Janeiro en
1976, "es el alma de Lobelle, un jugador diferente, que pone el punto de calidad y sobre el que hay
que estar muy encima", como así asegura Ari Santos.
El cierre del Barça Alusport se deshace en elogios hacia Lobelle, "un muy buen conjunto"
donde destacan jugadores como Aicardo, Rafael o el goleador Charlie, pero por encima de todos,
apunta a un nombre al que hay que vigilar: Alemão. "Defenderle bien es frenar buena parte de las
opciones de Lobelle, será la clave de la eliminatoria".
Baja en los dos precedentes de esta temporada
El de Río de Janeiro, que debutó en la División de Honor a mediados de los 90 de la
mano del histórico Talavera y que también ha jugado en Playas y O'Parrulo, ha demostrado que los
años no pasan para él. Contra Fisiomedia Manacor fue decisivo, especialmente en el segundo partido
de la serie, en el que ofreció un recital y mantuvo a su equipo en competición. "Es fundamental en
el juego de Lobelle. Las dos veces que hemos jugado contra ellos esta temporada no ha jugado y su
baja se nota mucho en un equipo joven como el suyo ", asegura Carlos Muñoz. Tanto el madrileño como
Ari Santos deberán evitar que Alemão reciba con espacios y pueda encarar a su defensor. Ahí es
donde el capitán de Lobelle puede decantar cualquier partido.