12.04.2008 23:26
La hora de la verdad
Verònica Díez
El partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones contra el Kiel ya está aquí. Catalanes y alemanes se enfrentarán este domingo a partir de las 16:45 horas en el Palau. Será complicado remontar 10 goles, pero todavía no está nada dicho.
El FC Barcelona tiene su última oportunidad de conseguir jugar la final de la competición europea
ante el Ciudad Real. El
41 a
31
del partido en Kiel pesa como una losa sobre los azulgranas. Sin embargo, el equipo no ha
tirado nunca la toalla, y
siempre
ha confiado en sus opciones
. Ésta es la actitud que pedía Manolo Cadenas a sus jugadores y ahora sólo queda
demostrarlo en la pista.
¿Cómo llega el Barça?
El Barça está deseando jugar este partido. Los propios jugadores han asegurado que la mala
sensación que les produjo la derrota en Alemania, les dio la energía necesaria para querer disputar
el segundo partido lo antes posible. Ya no tendrán que esperar más. Los hombres de
Cadenas
se han preparado durante esta semana para llegar al 100% al partido, y para solucionar
los errores cometidos en Kiel. Además de los entrenamientos en la pista y en el gimnasio, el
conjunto catalán se ha reunido, ha hecho sesiones de video, porque el trabajo psicológico también
es importante.
El miércoles pasado, el Barça ganó al Portland San Antonio por
39 a
34
. Esta victoria significó mucho para los azulgranas, que después de venir de Kiel con un
41 a 31 en contra, necesitaban un empujón para volver a ser el gran FC Barcelona que habían
demostrado hasta el momento.
Por lo que respecta a la lista de convocados, David Barrufet sigue siendo baja por lesión.
Jerome Fernández, Joan Cañellas y Eric Gull son los jugadores descartados para este partido.
El rival
El Kiel no ha dejado de demostrar a lo largo de esta temporada porqué es el actual Campeón de
Europa. Es un equipo que rinde al máximo en cada partido, que no deja de correr en ningún momento
en la pista y que al contraataque son más que eficaces, por no hablar de su defensa y su portería.
Cierto es que en el partido en su casa todo les salió perfecto, pero aún así es uno de los mejores
equipos de balonmano del mundo.
Omeyer como portero, Alhm como pivote y Karavatic desde la primera línea, son los hombres
clave del conjunto alemán, aunque en realidad lo más destacado del Kiel es su gran juego en
conjunto. Todos los jugadores acaban aportando algo al resto del equipo y esto les hace ser todavía
un rival más complicado, ya que la falta de uno de sus jugadores estrella no disminuye el potencial
del grupo.