En un derbi catalán muy intenso, el Barça Borges ha sumado la 23a victoria en la Liga Asobal y da otro paso hacia el título. El Fraikin Granollers ha plantado cara hasta donde las fuerzas y el mayor talento azulgrana le han permitido.
Fotos: Àlex Caparrós - FCB.
La ficha del partido
FC BARCELONA BORGES, 36
FRAIKIN GRANOLLERS, 29
FC Barcelona Borges (16+20): Saric (Sjöstrand); Víctor Tomás (4), Igropulo (2),
Sorhaindo, Jernemyr, Noddesbo (5), Juanin (7) -siete inicial-, Sarmiento (4), Rutenka (2), Raúl
Entrerríos (1), Nagy (7), Iker Romero (4) y Rocas.
Fraikin Granollers (13+16): Ohlander; Svitlica (6,), Campos (1), Grundsten (3),
Malasinskas (5), Antonio García (6), Nikcevic (1) -siete inicial-, Blanxart (2), Nenadic, Resina
(1), Salva Puig (2), Raigal (2) y Manel (ps).
Parciales (cada cinco minutos): 3-2, 6-3, 8-4, 10-9, 12-11, 16-13 (descanso),
21-16, 24-21, 27-23, 29-25, 31-27 y 36-29 (final).
Árbitros: García Serradilla y Martín Lorente.
Pabellón: Palau Blaugrana. 2.724 espectadores.
Al descanso, los azulgranas ganaban por tres goles de diferencia, después de un inicio brillante
(8-3) y de responder a la reacción vallesana, que ha llegado a empatar el duelo. En la segunda
mitad, el buen trabajo colectivo y mayor talento han dado una victoria muy importante. Los siete
goles de diferencia final han sido la máxima ventaja para el conjunto de Pascual. Al día siguiente
de saberse que dejará el Club a final de temporada, Iker Romero ha colaborado con cuatro goles en
la victoria del Barça Borges.
Primer tirón azulgrana
Como todo buen derbi, el partido ha comenzado con intensidad, fuertes
defensas 6-0 y muchos problemas para encontrar la portería rival. Sin embargo, con 2-2 en el
electrónico, el Barça Borges ha abierto brecha con una primera escapada. Iker Romero ha conseguido
dos goles seguidos que le han valido una buena ovación de la grada, y Juanín ha completado los
buenos minutos locales con el 5-2. Un desesperado Manolo Cadenas se ha visto obligado a pedir el
primer tiempo muerto del partido.
Los locales mandaban con la misma autoridad de toda la temporada. Defensa granítica y un
Saric espectacular para acabar abriendo hueco con los goles en velocidad de Juanín, el martillo de
Igropulo y la rosca diabólica de Noddesbo (8-3). Pero a medida que Ohlander ha aparecido, el
Fraikin Granollers ha subido su intensidad y ha sido capaz de volver a entrar en el partido.
Svitlica y Antonio García -el mejor de los vallesanos- culminaban las acciones de un rival
muy intenso, con fe y que ha demostrado el porqué de su excepcional temporada, llegando incluso a
empatar el duelo a once goles. Pero un fogonazo final de Juanín, dos goles de Rutenka y las paradas
de Saric (13 en el primer tiempo) han devuelto el margen de goles al descanso (16-13).
Mayor talento y más banquillo
El segundo tiempo ha comenzado con un gol de Nagy desde la larga
distancia, otro de Juanín a la contra y una parada brillante de Saric. Es decir, la misma historia
de siempre, la que escribe un Barça Borges implacable esta temporada en la liga doméstica.
El equipo de Pascual ha exhibido virtudes, delante y detrás, y ha recuperado la máxima
ventaja de seis goles (20-14). Nagy ha mostrado muy efectivo (6 goles en la segunda mitad),
encabezando una nueva escapada azulgrana que, una vez más, ha encontrado respuesta en los
visitantes. El ambiente se ha calentado y de lo lindo con la intensidad presente sobre la pista y
la mala gestión que han hecho los árbitros de ellas. Unas decisiones muy discutidas han dejado a
los azulgranas con sólo tres jugadores sobre la pista. Una insólita inferioridad que el Granollers
aprovechó para acercarse peligrosamente ante la alegría de los muchos aficionados vallesanos
presentes en las gradas (24-22).
Pero el Barça Borges ha resistido bien los buenos minutos rivales y ha
recuperado los cinco goles de margen (29-24). Esta vez los intentos del Fraikin Granollers, muy
tocado, ya no han fructificado. La entrada en pista de Sjöstrand, además, ha revolucionado la
defensa azulgrana. El sueco se ha lucido con varias intervenciones, y en ataque el equipo
barcelonista ya no ha dado más margen de reacción. Al final, victoria por siete goles, quizá un
poco excesiva por la igualdad del partido, pero en cualquier caso un triunfo de aquellos que acerca
de verdad los azulgranas al título de Liga.